Amelie, mi niña consentida, mi
tesoro con alas, mi compañera de juegos y de vida ha partido arropada entre mis
manos. Nos regaló 8 años de felicidad, 8 años de cariño y ternura, un tiempo que ha resultado demasiado corto. Ella nos hizo descubrir el mundo de las aves, nos convirtió en mejores personas, nos hizo más humanos y nos dió toneladas de amor y compañía. Tan adorable y
tan lista era mi pequeñita... ¡cómo te echo de menos!
Ahora me toca llorarla, nos toca llorarla, Ramón y yo la extrañamos enormemente, la casa se ha quedado más vacía y silenciosa y Amadea la busca en la jaula y ahora no juega ...le falta su compañera, nos faltas tú.
Prometo que siempre te voy a recordar con una sonrísa
porque eras un ser especial y maravilloso y sentíamos verdadera adoración por ti. Si echo la vista atrás todo lo
que recuerdo es bonito pero, hoy aún no puedo sonreír porque duele demasiado tu partida.
Te quiero mi dulce Amelie Lorón....
Jamás te olvidaremos...fuímos muy afortunada por tenerte....
Jamás te olvidaremos...fuímos muy afortunada por tenerte....
Agüito, Agüito...mi amor