ar aquí. La película en cuestión es una francesa llamada "Eres muy guapo" y cuenta la historia de un granjero llamado Aymé que tras quedarse viudo se encuentra desbordado por el caos de su hogar. Más fastidiado que apenado entiende que necesita a alguien urgentemente en su vida para que le ayude con el trabajo y el desorden de la casa. Movido por esa necesidad decide acudir a una agencia matrimonial con la firme idea de que él no quiere a alguien para su cama sino para sus tierras, no tiene una necesidad afectiva, no necesita amor, sólo un par de manos que le ayuden en la casa y en el duro trabaj
o del campo. La directora de la agencia entiende que su caso es más práctico que afectivo, y decide entonces enviarlo a Rumania, donde un gran número de chicas están dispuestas a todo por dejar la miseria en la que viven. Y entre un ramillete de bellas rumanas encuentra a Elena, una inteligente y agradable mujer que le aportará otra cosa. Con ella, Aymé se va a redescubrir, va a ser capaz de sentir el dolor y el deseo. Elena desembarca de Rumania con su frescor, su inocencia, su experiencia con la miseria, y el deseo de una vida mejor. No les une un enamoramiento, a él le
interesa su ayuda y ella está huyendo, pero ambos se necesitan y es así como comienzan a establecer lazos. Poco a poco, ella introducirá un poco de luz y una chispa de alegría en la anodina y sobria vida de Aymé. La historia gira sobre ellos pero, también los personajes secundarios tienen realmente una importancia vital en esta película, forman el contexto humano y aportan otro ángulo, una reacción. Todos los personajes son reveladores en la historia, no existen porque sí, si no que tienen gran relevancia en las vidas de los protagonistas, haciendo ver mejor quien es Aymé, así como su forma de ver la vida. Es una película bonita, tierna y entretenida, con su dosis justa de humor y amor.
