Haciendo largos en la luna

 
Toda alma bohemia es nocturna,
y yo siempre soy la última habitante de mi casa...
Amelie, mi lorita mayor también tiene alma bohemia,
mientras las otras cuatro duermen ella y yo
nos quedamos moviéndonos en la noche, despacio,
sigilosas y sin sueño, pero con sueños...
,
Estoy tumbada en el sofá, el portátil en las piernas,
bajito suena una pieza clásica,
el balcón abierto y la luna preciosa
y anaranjada frente a nosotras...
Me mira, yo la miro...nos miramos las tres...
tres hembras nocturnas, cómplices y silenciosas...
,
Todas las noches desde este mismo ángulo
vengo observándola, viene observándome
y cada noche la luna se muestra más oronda,
desde una pestañita en el cielo,
a esta con visos de volverse queso de bola.
,
Cuando era pequeña la miraba mucho,
pero era los viernes cuando le hablaba,
me iba al patio del medio,
me subía a la escalinata, para estar más cerca
y le decía que estaba muy contenta porque: era viernes,
porque al día siguiente no había cole y porque daban
en la tele el "1, 2, 3".
Era el súmmun de la felicidad;
aún hoy el viernes es mi día favorito.
,
Confieso que alguna vez he llegado a ver una cara en la luna,
y era la cara de Buñuel, no sé que diría Freud de esto.
El caso es que, tantos años mirándola,
viendola crecer y decrecer y...
¡sé tan poco de ella!
,
Hasta hace unas pocas noches no supe que la luna
tiene  mares y el que me fascinó es: 
el mare crisium (o mar de la crisis
para no desentonar con esta época), los aficionados
a la astrología seguro que conocen muchos secretitos como
ese, pero yo admito que no tenía ni idea...
Desde ese día me da por pensar
si habrá sirenas en la luna...

Texto: Bohemia