viernes, diciembre 07, 2018

La bella y los perros...


El azar, la casualidad, me ha puesto ante esta pequeña/gran película que por momentos me ha perturbado, sacudido y encogido el corazón. En otras me ha llenado de rabia y frustración por lo que pasaba ante mis ojos. Y al final ha conseguido que me sintiera muy orgullosa de esta heroina que no se deja doblegar ante las bestias. ¿Qué se puede hacer si los que te persiguen son tu única esperanza?


La película está basada en una historia real ocurrida en 2012 y refleja en nueve actos el calvario que tiene que recorrer una joven en busca de justicia tras sufrir una violación. Mariam, una estudiante de la ciudad de Túnez, se ve atrapada en una pesadilla tras acudir una noche a una fiesta para pasar un buen rato junto a sus amigas. Y es que lo que comienza como una gran velada, acaba marcando uno de los peores momentos de su vida. La protagonista en el primer acto se mancha el vestido y uno más provocativo le viene dado sin tener elección. Una situación accidental que a la vista de las autoridades refuerza su derecho a actuar impunemente contra ella.


Con nueve planos esta película nos cuenta una desgarradora historia que por desgracia está basada en hechos reales. Me ha parecido una película necesaria, por lo que cuenta y por como es contada. Narra, más que la violación, la denuncia de la agresión ante los que son juez y parte del sistema. Y lo hace como digo en nueve planos secuencias, los cuales no dan tregua al espectador. 

  
Puede que sea una película dura y seguramente muchas personas no disfruten con su visionado pero, creo que es una película necesaria y valiente y eso siempre es de agradecer. Mención epecial para la gran interpretación de Marian Al Ferjoni, que pasa de la inocencia a la madurez en tan fatídica noche.